Ana María Matute @ananmatute
La palabra que da nombre al restaurante es de origen japonés y engloba en ella sola muchas expresiones artísticas como el teatro, la danza y el canto. Esta fue la inspiración de los chef Edward Lara y Luciano Aletti para elaborar un menú y desarrollar el ambiente del restaurante Noh que abrió en febrero. Su idea fue reunir los gustos de Asia y presentarlos en un menú sencillo pero sorprendente.
“Cuando hablamos o describimos los platos como fusión asiática no nos referimos a que, por ejemplo, presentamos algo tradicional vietnamita con técnicas e ingredientes franceses. Para nada. Todo es asiático, las técnicas, los ingredientes y los sabores”, explica el chef Edward Lara. Lo que se logra es un paseo por sazones, condimentos y productos del lejano oriente con la finalidad de despertar el paladar del comensal.
Todo fue concebido para educar a los caraqueños sobre los sabores más conocidos de una cocina que siempre ha generado curiosidad pero que pocos han podido probar de manera auténtica. Lara confiesa que el menú fue diseñado para abrir el camino hacia algo mucho más intenso.
“No tenemos que salir de Asia para encontrar gustos y cosas diferentes, y una buena parte se refleja en la carta. Pero más allá de eso es la naturaleza del local que Aletti y yo hemos querido tener, uno que propicie la conversación entre amigos, que compartan la mesa”.
Como una de las costumbres asiáticas por excelencia, en Noh los comensales pueden elegir entre nueve tipos de entrada y seis platos fuertes para compartir.
Los platos. Lujuria, Equilibrio, Sorpresa, Boom son los nombres de algunos de los platos que ofrecen Lara y Aletti en Noh. Como se puede observar, no es posible adivinar de qué se trata cada uno.
De lo que sí se puede estar seguro es de que todo es de Asia y vienen con una explosión de sabor, como un wantón relleno de salmón ahumado con surimi y coulis de parchita; o la croqueta al estilo japonés, con base de papa pero rellena de queso. No faltan las gyosas pero servidas con la parte caramelizada hacia arriba, como se hace tradicionalmente; o un fabuloso spring roll con vegetales frescos que por algo llaman Equilibrio.
Hay muchas maneras de comer en Noh. Una de las preferidas es una degustación a siete tiempos, en la que el comensal puede escoger del menú lo que desea probar o puede dejárselo al chef. También ofrecen platos fuertes y un menú tipo ejecutivo para los que deben comer en un horario determinado.
La pandemia los ha golpeado, pero para ello tienen la respuesta: desde ahora los platillos de Noh pueden viajar a la casa del comensal y llegar tan deliciosos como si los comiera en el restaurante.
El chef Lara habla de planes porque está convencido de que el paladar del caraqueño quiere descubrir nuevos caminos en la cocina asiática. Por eso promete más intensidad para el cambio de menú que planean para octubre.
El Dato. Noh queda en la plazoleta de la planta baja de la torre Cavendes, en la avenida Francisco de Miranda. Está abierto desde las 11:30 am hasta las 3:00 pm. Los domingos hacen brunch temáticos (comida asiática).