Por Ana María Matute
Para el gelatero venezolano, un helado siempre es un premio. Confiesa que cada vez que crea uno, lo hace con la idea de que despierte memorias y sentimientos. La chicha le recuerda a su infancia
Ezequiel Gómez Garófalo y su hermana comenzaron vendiendo sus helados en farmer markets en Florida y fue así como le despertó la curiosidad de adentrarse en el mundo de la gelatería. A partir de allí, ya ha creado más de 100 sabores diferentes y lo que comenzó como venta ambulante cuenta desde hace un tiempo con un local y una marca en Miami, Gelato Gourmet.
Aunque confiesa que no ha sido fácil, pues reconoce que es un mercado muy competitivo, Gómez Garófalo ha tenido mucho éxito con sus sabores y confiesa que los más populares son los creados a partir de los recuerdos de su infancia en Venezuela, como el helado de Zamba, de Toronto, de Pirulín.
Pero es la chicha la que se lleva los laureles. “De pequeño tomaba chicha todos los días. Es más, decía que quería se chichero. Ahora no vendo chicha, pero la convertí en helado”.
Su estrategia es muy simple. Como considera el helado como un premio, recurre no solo a su memoria, sino a la de mucha gente que conoce, colombianos, puertorriqueños, latinos todos, y les pregunta qué sabores recuerdan de su infancia. Allí comienza el proceso creativo.
“Trato de llegar al corazón de los clientes. Mis sabores van dirigidos a llevarlos a un viaje, a recordar su infancia. Son helados con mucho sentimiento”.
La pandemia
Recién se habían comprado una máquina de hacer paletas cuando comenzó la cuarentena y la pandemia, y es eso lo que ha mantenido a flote a Gelatería Gourmet. Aunque las ventas han bajado mucho, los sabores latinos en este formato se han vuelto muy populares.
La de chicha lleva relleno de leche condensada; reprodujo a la perfección el popular Bombón, de fresa y leche condensada recubierto con una capa de chocolate crujiente. Además, ha logrado poner en marcha un servicio de delivery para llevarlos a la casa de los clientes.
“Nos ha tocado reinventarnos. Pero nada que no hayamos hecho. Este es un mercado muy competitivo, cada día salen cosas nuevas y hay que estar siempre innovando, no se puede descansar”, asegura.
Gómez Garófalo sabe de premios y de competencia, pues se ha ganado varios por sus sabores sobresalientes. En 2017 obtuvo el tercer lugar en el Gelato Festival Americen en Arizona. En 2018, el segundo lugar en una competencia en Washington DC con su helado llamado Crunchy Fantasy de merey, caramelo y arroz inflado. En Boston el año pasado también logró el segundo lugar con su Crema Floridian. Actualmente ocupa la casilla 22 del ranking a escala mundial y el primer lugar de Florida. Y todas sus creaciones pueden disfrutarse en la heladería Gelato Gourmet.